Durante siglos, muchos pueblos en Europa han escogido el color blanco en las fachadas de sus casas para unir en un resplandeciente y armonioso espectáculo, la identidad de sus lugares. Esto revela una interesante verdad: el color blanco tiene una serie de propiedades energéticas que afecta la temperatura.
Ha sido una de las dudas más comunes de millones de turistas, sobre todo en la región de Andalucía conocida como la Ruta de los Pueblos Blancos, en España. Son lugares que todavía escapan de la oleada moderna y globalista del estilo inmobiliario actual.
Y es que además de dar un toque estético agradable y acogedor, que conmueve la vista y fusiona el pueblo en armonía con el paisaje natural y arquitectónico, el color blanco ha sido el mejor aliado para lidiar con las altas temperaturas.
[anuncio_b30 id=1]¿Por qué el color blanco?
La pintura impermeabilizante blanca se ha convertido en un aliado que no puede faltar en diseños urbanísticos donde se busca alternar de forma armónica cualidades estéticas con cualidades ambientales, donde el resultado es un ambiente fresco y elegante.
Durante el verano, el blanco refleja los rayos del sol, y esto hace que los muros y construcciones de casas se mantengan en una temperatura más estable y fresca, a diferencia del uso de otros colores.
Otras ventajas del color blanco en fachadas
Iluminación de ambientes
Pero no sólo hay un efecto en espacios exteriores, sino también en interiores, donde se puede lograr un efecto de iluminación importante. Ideal para habitaciones que no cuenten con mucha iluminación natural.
Percepción de mayor espacio
Al tratarse del color más puro dentro de una carta de colores, la uniformidad puede derivar en una percepción de grandeza y vitalidad en espacios que antes resultaban más pequeños. Esto se consigue por lo mucho que resalta el blanco en cualquier superficie.
Capacidad de adaptación y combinación
Los pueblos alrededor de Europa que se caracterizan por lo blanco de sus casas y construcciones milenarias, aparte de las razones antes mencionadas, tienen algo en común: todas están en territorios geográficos con riqueza y variedad de paisajes.
Sin importar lo verde de la montaña, o lo brillante del mar en la costa donde se encuentren, el color blanco se adapta al espacio y situación, haciendo combinación perfecta con el ambiente. Lo mismo aplica para espacios interiores, donde logra una fusión perfecta con cualquier tipo de mobiliario.
Mayor durabilidad y resistencia
Estadísticamente, las construcciones embellecidas con este color, presentan una mayor resistencia al tiempo y a las condiciones de la intemperie, demostrando una sólida durabilidad que significa un factor determinante en la planeación de cualquier urbanismo.
Efecto psicológico
El blanco es el color más subestimado y usualmente tomado por aburrido, pero esto no podría estar más alejado de la realidad. Este color tiene una poderosa cualidad de transmitir paz, pureza y consistencia.
En un nivel subconsciente produce un destacable efecto tranquilizador, que al igual que su efecto con los rayos del sol, es capaz de esquivar los pensamientos y emociones primarias negativas, lo que a nivel psicológico se conoce como “efecto catalizador”.
[anuncio_b30 id=7]Ruta de los Pueblos Blancos (España)
Comenzando por España, la joya de Mediterráneo, existe una serie de localidades que año tras año atraen a miles de turistas de todas partes del mundo que se maravillan al ver la belleza arquitectónica de estos pueblos que datan de siglos de antigüedad.
Estos son:
- Alcalá del Valle
- Algar
- Algodonales
- Arcos de la Frontera
- Benaocaz
- Benamahoma
- Bornos
- Coto de Bornos
- El Bosque
- El Gastor
- Espera
- Grazalema
- La Muela
- Olvera
- Prado del Rey
- Puerto Serrano
- Setenil de las Bodegas
- Torre Alháquime
- Ubrique
- Villaluenga del Rosario
- Villamartín
- Zahara de la Sierra
Pueblos blancos más conocidos de Europa
Cadaqués (España)
Es considerado como el pueblo más bonito en la región de Cataluña, se encuentra en la renombrada Costa Brava, donde a primera vista resaltan sus casas blancas, callejones llenos de alegres personas, sus muelles y botes.
Oia (Grecia)
Forma parte del archipiélago de Santorini, se caracteriza por el diseño único de sus casas que están construidas en una ladera semi-volcánica, su color blanco produce una de las más hermosas vistas durante el atardecer, considerado como uno de los mejores lugares para contemplar la puesta del sol.
Ostuni (Italia)
Localizada en Apulia, famosa región por estar situada en la zona donde se forma la “bota” en el mapa de Italia.
Ostuni es la mejor prueba de que el color blanco en las construcciones produce una notable diferencia en la temperatura, disminuyéndola considerablemente.
Es uno de los destinos más visitados por turistas que buscan una conexión única con la naturaleza, donde el blanco de sus edificios y casas, el verde de su vegetación y el azul de su costa se mezclan en uno de los pueblos más bonitos del Mediterráneo.
Lecce (Italia)
Lecce es un pueblo ubicado en la región de Salento, resalta porque es quizás uno de los mayores tesoros arquitectónicos de la historia milenaria de todo el territorio italiano. Es también la prueba de que el color blanco puede combinar perfectamente con otras tonalidades de construcciones más antiguas.
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Jose Palanca
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