La bomba del Zar

En ocasiones la historia se explica a través de pequeños acontecimientos y anécdotas acaecidas en el tiempo. A través de la Bomba del Zar introduciré al visitante de la web al mundo de la amenaza nuclear que tuvo su apogeo durante la Guerra Fría entre las dos grandes superpotencias del siglo XX: EEUU y URSS. En esta entrada se explicará el hecho: la prueba de la Bomba del Zar. En la siguiente entrada se explicará la proliferación nuclear durante el siglo XX y en qué estado se encuentra en la actualidad.

¿Qué es la Bomba del Zar?

La Bomba del Zar fue una bomba de fusión de hidrógeno de 50 Megatones. Para ponernos en situación una potencia 3.800 veces mayor que la lanzada en Hiroshima y que hizo que Japón tuviera más tarde que capitular y poner fin a la Segunda Guerra Mundial.

¿Cuándo se lanzó la Bomba del Zar?

El 30 de Octubre de 1961 los cristales de las casas septentrionales de Finlandia se rompen. Los sismógrafos de toda la tierra detectan un temblor proveniente del norte de Rusia. Una onda de presión recorre 3 veces la longitud de la esfera terrestre. En el norte de Siberia sus habitantes vieron un nuevo amanecer: el 30 de octubre de 1961 a las 11:33 de la mañana la Unión Soviética envió un mensaje a todo el mundo.

Ese día 30 de octubre de 1961 a las 11:33 de la mañana la Unión Soviética realizó la mayor explosión realizada en toda la historia a manos del hombre. El 30 de octubre de 1961 a las 11:33 de la mañana la Unión Soviética explotó la Bomba del Zar.

Contexto histórico: la Guerra Fría

El lanzamiento de esta bomba tuvo lugar durante la Guerra Fría del siglo XX. Durante esta Guerra Fría, la Unión Soviética y Estados Unidos se enfrascaron en un guerra tecnológica intentando siempre avanzar al contrario para infundirle temor y respeto, a la par que ganar credibilidad respecto el resto del mundo. Era una guerra por ver quién era el mejor en todos los aspectos, para así demostrar la superioridad de su ideología y forma de vida.

En los inicios del Guerra Fría, en el aspecto tecnológico, la URSS se adelantó a los norteamericanos lanzando el primer satélite al espacio (el Sputnik) y enviando al primer hombre fuera de la atmósfera terrestre (Yuri Gagarin). Pero los Estados Unidos, con un golpe de efecto, envió la primera expedición lunar en 1969, posiblemente antes de tiempo y jugándosela toda a una carta, que afortunadamente salió de forma perfecta.

La carrera armamentística entre EEUU y la URSS

Respecto a la carrera armamentística entre las dos grandes superpotencias, Estados Unidos se adelantó cuando al final de la Segunda Guerra Mundial consiguió controlar la energía nuclear para fines militares. El ejemplo de su superioridad armamentística en el terreno nuclear se hizo evidente con el lanzamiento de las bombas de Hiroshima y Nagasaki.

Rápidamente, tras acabar la Segunda Guerra Mundial, la Unión Soviética puso su maquinaria en marcha y empezó a conseguir a científicos, a formar a su gente en universidades, a invertir ingentes cantidades de dinero en industria militar. Fruto de ese trabajo en 1949 se consiguió realizar con éxito la primera detonación atómica de la URSS, con la bomba RDS-1.

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Figura 1. Réplica de la Bomba del Zar en el Museo de la bomba atómica de Sarov. Fuente: Wikimedia Commons

El programa soviético de investigación y desarrollo de armas nucleares continuó. Y así se llegó a inicios de la década de los años 60, cuando decidieron probar una bomba de gran potencia, heredera de las potentes investigaciones de bombas termonucleares de los 50. Así, decidieron probar a Iván, nombre en clave de la bomba.

Descripción del lanzamiento e impacto de la Bomba del Zar

La mañana del día 30 de octubre un bombardero ruso del tipo Tupolev Tu-95 despegó de alguna base siberiana rumbo al archipiélago de Nueva Zembla, en pleno Océano Glacial Ártico. El bombardero, antes de la detonación, había sido pintado con una pintura especial, blanca y altamente reflectante, para que la onda de choque térmica posterior no lo afectase demasiado.

El piloto soltó la bomba a las 11:30 desde 10.500 metros de altura. A continuación salió con inmediata rapidez de la zona cero hasta llegar a la considerada zona segura. A las 11:33 explotó a 4.200 metros de altura sobre el nivel del mar.

La detonación provocó que la temperatura alrededor de la detonación se elevara millones de grados y que la presión fuera elevada. Fruto de la detonación, la luz provocada por la bomba fue vista a unos 1.000 kilómetros de distancia. La onda de choque fue elevada: llegó incluso a romper vidrios a más de 900 km de distancia. La nube de hongo producida por la explosión se elevó a una altitud de 64.000 metros antes de nivelarse.

En el siguiente enlace se muestra la detonación de la bomba:

¿Dónde se lanzó la Bomba del Zar?

La bomba se lanzó en el archipiélago de Nueva Zembla, en pleno Océano Glacial Ártico. En aquel entonces este archipiélago pertenecía a la URSS. Actualmente forma parte de Rusia.

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Figura 2. Isla de nueva Zembla. Localización de la explosión de la bomba del Zar. Fuente: Wikimedia Commons

Análisis del impacto de la Bomba del Zar

Debido a que la bomba fue una bomba de fisión-fusión-fisión, en la que el 97 % de la energía generada se produjo a partir de la fusión nuclear del hidrógeno, esa energía se convirtió en una cantidad enorme de calor (llegando a alcanzar millones de grados).

No se produjeron excesivas radiaciones de alta energía perjudiciales para los seres vivos. Ahora bien, queda un pequeño porcentaje procedente de la fisión necesaria para provocar la fusión que sí que emite radiación durante miles de años. Esta sí es una radiación perjudicial para las formas de vida terrestres.

Consecuencias de las pruebas

Contra todo pronóstico, tras esta explosión se desechó realizar más bombas de tanta potencia. ¿Por qué? Debido a que la mayor de energía liberada fue transmitida en forma de calor hacia la atmósfera. Esto provocaba que se reduciría el radio de acción sobre un posible objetivo militar.

Además de ello, esta bomba era muy pesada. Como consecuencia, en el caso de tener que trasladar la bomba hasta el objetivo sería fácil el ser interceptada por cazas enemigos.

Pero el efecto propagandístico se había realizado. En una época de Guerra Fría donde se intentaba demostrar la superioridad tecnológica de uno respecto al otro, la Unión Soviética consiguió un golpe de efecto de cara a la población mundial.

simulación de la bomba del Zar en París

Figura 3. Simulación de la bomba del Zar si hubiera sido lanzada en París. Fuente: Wikimedia Commons

Conclusión

Las pruebas nucleares fueron una constante en muchos años de la Guerra Fría. La Bomba del Zar es un acontecimiento evidente de cómo se realizaban las pruebas nucleares para la comprobación y mejora de armamento nuclear. La finalidad era la de intentar superar a su enemigo y de paso demostrar su superioridad tecnológica.

Pero estas pruebas tenían un peligro inherente al mismo hecho de probarlas. La amenaza atómica podía volverse en contra de uno mismo, ya que ponía en peligro no solamente la nación, sino la misma raza humana. Además de este hecho, veían con temor que otras potencias obtuvieran la tecnología nuclear para la fabricación de armamento.

Fruto de ello, las superpotencias acordaron frenar en la medida de lo posible la proliferación nuclear. Con eso se reservaban la hegemonía nuclear e intentaban llegar a acuerdos para frenar el despilfarro económico que conllevaban esas pruebas y el peligro de estas armas de destrucción masiva.

Bibliografía de consulta básica

http://en.wikipedia.org/wiki/Tsar_Bomba

http://web.archive.org/web/20061230173710/http://www.atomicforum.org/russia/tsarbomba.html

http://nuclearweaponarchive.org/Russia/Sovwarhead.html

Bibliografía para ampliar conocimientos

Carpintero Santamaría, N. La bomba atómica. Ed Díaz de Santos. 2007

Powaski, Ronald E. La guerra fría: Estados Unidos y la Unión Soviética, 1917-1991. Editorial Crítica. 2011

Mc Mahon, Robert. La Guerra Fría: Una breve introducción. Alianza Editorial. 2009

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Jose Palanca

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