¿Qué es la tafonomía? La tafonomía es una disciplina de la paleontología que estudia los procesos que se han sucedido antes, durante y después del enterramiento de un organismo en un yacimiento arqueológico. Otra definición similar, empleada por Colin Renfrew, nos dice que la tafonomía es el estudio de los procesos que han afectado a la materia orgánica, como por ejemplo los huesos, después de la muerte.
El origen del término tafonomía: Ivan A. Efremov
La definición de tafonomía vino dada por Ivan A. Efremov en 1940 para la disciplina científica que se ocupa del estudio de la transición de los restos orgánicos desde la biosfera a la litosfera.
Para darle nombre a esa disciplina escogió un nombre compuesto de dos raíces griegas “taphos” y “nomos”, que significaba literalmente leyes del enterramiento. El origen de la creación de esta disciplina se debió a la inquietud de Efremov al detectar errores en la interpretación paleoecológica de los fósiles.
Ampliación del campo de estudio de la tafonomía
A partir de Efremov, los objetivos, métodos y técnicas del estudio de la tafonomía se incrementaron a medida que surgieron nuevos interrogantes en diversas disciplinas. De esta forma la investigación tafonómica fue incluyendo, no sólo los procesos de fosilización, sino también la preservación de los rasgos paleobiológicos de los restos fosilizados, rasgos biológicos o de comportamiento.
Los procesos tafonómicos
Los procesos en el ámbito de la tafonomía se suelen agrupar en dos categorías:
- procesos biostratinómicos.
- procesos fosildiagenéticos.
Esta división resulta de utilidad ya que enfatiza los procesos y agentes actúan sobre los restos de organismos en dos contextos diferenciados, el subaéreo y el subsuperficial.
Figura 1. Estados de conservación tafonómica. Esquema basado en Fernández-López, 2000: Temas de tafonomía. Autor: PePeEfe. Fuente: Wikimedia Commons
Los procesos bioestratinómicos
Los procesos bioestratinómicos son los que experimentan las entidades conservadas antes de ser enterradas.
Después del enterramiento se da paso a la tafocenosis, que es el conjunto de restos de organismos que fueron enterrados juntos. El área que ocupan estos organismos se denomina tafotopo.
En esta etapa se produce lo que se denomina preservación diferencial, que consiste en “la trama de agentes, procesos y transformaciones que han intervenido sobre los huesos durante los momentos previos al enterramiento”.
Durante los procesos bioestramónicos ocurrirá habitualmente la mayor pérdida de información en el registro fósil, ya que los organismos disponen de elevado porcentaje de materia orgánica blanda que se descompone fácilmente tras la muerte y que solamente se conserva cuando se producen situaciones excepcionales.
Tampoco hay que obviar que al morir un organismo vivo es integrado a la red trófica, pudiendo ser alimento para otros animales, hongos o bacterias, produciéndose elevada pérdida de información.
Se pueden enumerar cuatro principales procesos bioestratinómicos, que son:
- La reorientación, que tiene relación con el transporte de los restos. En este proceso tendrá mucha importancia la acción de depredadores, ya que se pueden encontrar fósiles en lugares de consumo.
- La desarticulación, que se produce en organismos con un esqueleto de varios elementos y que tiene como consecuencia la separación de las distintas partes de un mismo organismo.
- La fragmentación, que consiste en la rotura de piezas en otras más pequeñas.
- La corrasión, que abarca los efectos ocasionados por la abrasión física, la erosión biológica y la disolución química.
Los procesos fosildiagenéticos
Los procesos fosildiagenéticos son aquellos experimentados por las entidades conservadas tras su enterramiento, es decir, tras el paso a la litosfera.
Durante este proceso se producirá la conservación diferencial, que comprende los agentes, procesos y transformaciones que intervienen sobre la materia orgánica durante el periodo de enterramiento. Estos procesos pueden ser también destructivos, al igual que en los bioestratinómicos.
Distintos procesos que se producen son la mineralización, la erosión, la permineralización, el neoformismo, la recristalización, el reemplazo, la disolución o la compactación.
Todos estos procesos dependerán de distintas variables como la acción de animales cavadores, microorganismos que viven bajo tierra, los componentes químicos del subsuelo, la influencia de flujos hidráulicos, etc.
Resultados de los procesos tafonómicos
Después de ambos procesos se obtiene la orictocenosis, que es el conjunto de fósiles que están, o han sido encontrados, juntos. Este conjunto de fósiles es el que se encontrará en el yacimiento.
El proceso de fosilización es complejo e implica la modificación de los elementos tafonómicos afectados, donde el organismo vivo inicial se transformará en uno nuevo de distinta composición y estructura.
Pero el proceso afecta de manera diferente a los distintos fósiles o a sus partes, en función de su composición, estructura y comportamiento en las diferentes fases producidas.
Por ello la preservación y la conservación tafonómica han sido acompañadas del calificativo diferencial. Sin embargo, la información puede ser parcial o estar sesgada respecto a la información paleobiológica original.
El análisis de los procesos tafonómicos
La tafonomía, definida anteriormente, se encarga de explicar cómo han sido producidos y qué modificaciones han experimentado los restos o señales conservados, desde su muerte hasta su fosilización.
La tafonomía consta de dos partes, análisis e interpretación. En el análisis se extraen los datos del pasado y se proporcionan unos resultados; y en la interpretación se harán esos resultados inteligibles.
Dentro del análisis tafonómicos encontraremos el análisis bioestratinómico. Este se ocupará de las modificaciones ocurridas antes del enterramiento. Por otro lado, el análisis fosildiagenético se ocupará de las modificaciones tras el enterramiento.
Objetivos y campos de aplicación de la tafonomía
Evolución de la aplicación de la tafonomía
Principalmente la tafonomía se ha centrado en el estudio de los huesos de animales en yacimientos arqueológicos.
Al inicio, los primeros arqueólogos se centraban en la morfología de las distintas especies y en lo que se podía decir sobre el medio ambiente o la cronología.
Pero progresivamente fue adquiriendo importancia otros aspectos. Por ejemplo, el transporte de los huesos nos podía indicar cuestiones como la subsistencia, la domesticación o la estacionalidad.
En los años 80 los estudios tafonómicos contribuyeron a la teoría del rango medio de la nueva arqueología.
Campos de estudios de la tafonomía en la actualidad
Un campo de estudio interesante en la actualidad es el análisis de las marchas y huellas que aparecen sobre las superficies de los huesos y que podrían tener origen antrópico. De este modo, se pueden estudiar los modos de vida de los humanos del pasado, destacando el estudio de las marcas de carnicería en los huesos.
Figura 2. Fósil de Trilobita. Fuente: Wikimedia Commons
Por ejemplo, se estudian huellas de evisceración, fracturas en huesos para facilitarla preparación culinaria o marcas de despellejado para extracción de pieles. Un ejemplo importante son los estudios sobre el canibalismo en nuestra especie. Estos estudios han sido posibles gracias a las huellas que dejaron en los huesos de seres humanos.
Otro campo es el estudio de enterramientos del pasado desde una perspectiva tafonómica. A través del estudio tafonómico se puede reconstruir secuencias de inhumación. Además, analizando la escenografía de estas inhumaciones podemos comprender aspectos sociales importantes de humanos del pasado. Por ejemplo, podemos conocer información sobre la jerarquía social de una cultura o la posición del hombre frente a la muerte.
Conclusión
Actualmente la tafonomía es una disciplina importante para el estudio del pasado. A partir del fósil registrado y clasificado por la taxonomía se puede conocer a la comunidad viva del pasado. De forma específica la tafonomía tiene relevancia el estudio sobre los grupos humanos del pasado.
Finalmente, la tafonomía permite interpretar el comportamiento y las costumbres humanas del pasado que de otra forma no podrían ser conocidas. Por este motivo es una herramienta importante para el estudio de la historia.
[anuncio_b30 id=9]Bibliografía
AGUIRRE, E.: 1997. La tafonomía como ciencia: aspectos epistemológicos. Cuadernos de Geología Ibérica, 23, pp. 37-52
FERNÁNDEZ MARTÍNEZ, V. 1991. Teoría y método de la arqueología, Madrid, Síntesis,
FERNÁNDEZ-LÓPEZ, S.R. 1998. Tafonomía y fosilización. Tratado de Paleontología, tomo I, Madrid, B. Meléndez.
PÉREX AGORRETA, M. J. (coord). 2012. Métodos y técnicas de investigación histórica I, Madrid, UNED.
RENFREW, A.C. y BAHN, P.: 1998. Arqueología. Teorías, métodos y prácticas, Madrid, Akal.
SEBASTIÁN, A. 2001. La tafonomía en las investigaciones arqueológicas. OPFyL, Universidad de Buenos Aires, 2001, pp. 1-18
Jose Palanca
Latest posts by Jose Palanca (see all)
- Los 100 mejores libros del siglo XXI según The New York Times - 26/07/2024
- Los mejores libros de historia de la Segunda República Española - 23/07/2024
- Los mejores libros sobre la Guerra Civil española - 23/07/2024
- Los mejores libros de historia contemporánea - 19/07/2024
- Los mejores libros de historia del fascismo - 18/07/2024
